PEYOTE Lophophora Williamsii |
El peyote, cuyo nombre huichol es "jiculi", es el sacramento religioso tradicional de muchas tribus nativas de México. Ha ido ganando popularidad en tribus de USA en el presente siglo. Los efectos se clasifican desde sensaciones eufóricas hasta intensas experiencias visionarias. Viene siendo utilizado para muchos propósitos: como ayuda al parto, tratamiento de la infertilidad, incrementar el vigor en los mayores, y para adivinación e inspiración artística. Los estudios médicos del peyote han revelado su efecto antibiótico contra bacterias resistentes a la penicilina. Está utilizándose para tratar artritis, reumatismo, pleuresía, resfriados y gripe, espasmos nerviosos, parálisis, ceguera, desordenes del oído y dolores diversos. Los usuarios informan que libera de la ansiedad y las hostilidades con una sensación de unidad hacia el prójimo y la naturaleza. Su uso ceremonial de los nativos americanos ha demostrado no causar ninguna dependencia física ni psíquica. Requiere unos 10 años en madurar. En USA está casi extinguido, y en México figura en la lista de especies en peligro. Es vital fomentar su repoblación.
Es muy sensible a las heladas temperaturas prolongadas cerca de 0oC, que podrían dañarlo o matarlo. La tierra del desierto de Chihuahua, donde el peyote crece, es alcalina en ph, con alto contenido en calcio y bajo en nitrógeno. Es posible trasladarlo a cultivo en invernadero, para protegerlo del frío y excesiva exposición solar. Con el cuidado apropiado, las plantas crecer más rápidamente que en la naturaleza. Los mejores resultados se obtienen en un invernadero con luz filtrada. En la cubierta del invernadero podría echarse un spray con componentes oscurecedores para reducir la cantidad de luz. Las bandejas con plantas, levantadas a medio metro de altura, servirán para mantener la tierra cálida en invierno. Las plantas crecerán más rápidamente y se harán más grandes cuando dispongan de más espacio para la extensión lateral de sus raíces.
Es aconsejable un ph de 6,5 a 7,2. La tierra debe ser bien drenada y suelta. Una mezcla de perlita (o piedra pómez), arcilla y materia orgánica bien abonada, es una buena combinación. La dolomita o conchas molidas son una buena fuente de calcio, pero no use mucha cantidad para no alcalinizar en exceso la tierra. La idea es crear una mezcla que drene rápido, provea de una buena aireación, ayude a la penetración de la raíz, posea no demasiada materia orgánica y tenga un apropiado ph.
La germinación de las semillas requiere una atención cuidadosa: luz adecuada, humedad, abono y calor. Necesitan una humedad constante para que no perezcan las semillas durante la germinación. El exceso de humedad es perjudicial.
Necesitan una temperatura de 21oC a 27oC durante el día y 15o durante la noche. Las semillas germinadas son muy sensibles al exceso de luz y deberían recibir un 30% de la intensidad de la luz normal, en el área de germinación.
La tierra de siembra de las semillas debe ser medianamente fértil. Es muy importante que la tierra sea esterilizada.
En primavera o al principio del verano se siembran las semillas superficialmente en la tierra prehumedecida en bandejas.
Un buen agente humidificador puede ser incorporado dentro de la tierra o aplicado durante el primer riego después de la siembra.
Las semillas germinan mejor en compañía, por lo tanto disemine 800-1000 semillas por bandeja. Las semillas no deben cubrirse completamente por la tierra. Una cubierta de plástico se coloca después encima de cada bandeja (estas bandejas con cubierta son vendidas en casas de horticultura y viveros).
Se riega colocando las bandejas de siembra sobre un recipiente plano con agua, hasta que la superficie de la tierra se humedezca por la acción capilar.
La germinación comienza alrededor de una semana, y continúa hasta que la mayoría de las semillas germinan en las primeras tres semanas. Después de la primera o segunda semana levantar un lado de la cubierta, unos 2,5 cm para que entre aire fresco durante el día. Cierre las cubiertas por la noche para mantener el calor. Las semillas de germinación tardía pueden aparecer a los primeros pocos meses. Después de un mes o más las cubiertas deben retirarse. No deje a las plantitas secarse. Seguir regando sólo hasta que estén bien arraigadas, lo que tarda unos 6 meses.
Cuando estén bien arraigadas fertilice ligeramente las plantas. La sobrefertilización producirán un débil crecimiento.
Las plantitas deben trasplantarse a un lugar más permanente una vez tengan alrededor de 1 cm a 1,25 cm de diámetro. Transplantar durante la primavera o principios de verano en recipientes suficientemente profundos para dejar a la raíz crecer a lo largo. Con el cuidado apropiado las platas pueden crecer hasta un diámetro de 2,5 cm en dos o tres años, después el crecimiento es progresivamente más rápido.
Recientes estudios nos indican que un abono con una proporción 9:11:18:3 (N:P:K:Mg), regando con 1gr por litro de agua, incrementa notablemente el crecimiento del peyote llegando a conseguir un diámetro de 4,5 cm en tres años. Al peyote le va bien el abono líquido "Compo cactáceas", aplicándolo en primavera y verano. Algunas variedades crecen más rápido que otras. Las plantas florecen a los tres años de edad.
Advertencia: los brotes jóvenes se ven muy afectados por los extremos de exposición solar, sequía y temperaturas frías. Durante el invierno, no dejar los brotes en terreno seco por periodos prolongados o perecerán. Igualmente deben protegerse del excesivo frío o heladas.
Use un spray con un 10% de vinagre para controlar el crecimiento de algas en la superficie de la tierra. Las tierras con alto contenido orgánico (especialmente musgo de turba) son propensas al crecimiento de algas y musgo. Las plantas arraigadas deben trasplantarse a una mezcla de tierra de tipo más mineral.
Cuando cultive el peyote a partir de esquejes, realice un corte limpio, después espolvoree con sulfuro agrícola y deje expuesto al sol el lado del corte, para que se seque en pocos días. Después déjese en un lugar cálido sin exposición solar directa, para prevenir la excesiva deshidratación. A las dos semanas las plantas son colocadas en una tierra de tipo mineral, manteniéndola moderadamente húmeda mientras las raíces se anclan.
Deje la tierra secarse entre los riegos, pero sin secarse completamente, ya que esto acabaría con las delgadas raíces. Durante la temporada fría no regar, para evitar que se pudran las raíces. Debido a la ausencia de riego las plantas comienzan a arrugarse, lo que es normal, entonces la savia está más concentrada, lo que le ayuda a resistir el frío. Pero no deje a las plantas desecarse demasiado. Darles un poco de agua algún día para que no perezcan.
En la naturaleza suele encontrarse en grupos, debajo de arbustos como el mezquite o la creosota, o a la sombra de una gran suculenta. El mejor momento para recolectar el cactus es después de una larga temporada de sequía, ya que el contenido en alcaloides suele ser mayor. Si se recoge en época de lluvias el contenido en alcaloides puede haber bajado en un 50%. Si la tierra es rica en nitrógeno, entonces los cactus son ricos en alcaloides. El abono nitrogenado es conveniente emplearlo durante una temporada corta, antes de la cosecha, sin excederse, dado que podría dañar las raíces. La raíz no contiene mescalina. Los ejemplares semimaduros pueden decapitarse y saldrán nuevas cabezas de la tierra, además pueden volverse a enraizar en la tierra o injertarse como explicamos más adelante.
Uso entre los nativos
La dosis mínima de peyote suele ser tres botones. Una dosis visionaria sería unos 27 gr. de peyote seco, lo que equivale a 300 mg de mescalina.
Hay quien lo toma con mosto para neutralizar la fuerte amargura, y la nausea. Otro método es hacer un cocimiento concentrado, hirviéndolo durante varias horas. La mescalina queda en el líquido. Se disuelve mejor en un medio ácido, por ejemplo agua con un 30% de zumo de limón, o un comprimido Redoxon (vit. C) de farmacias. Es aconsejable ingerir el peyote gradualmente durante una hora, para asimilarlo mejor.
Como incrementar la potencia de los cactus
- Es importante la presencia de gran variedad de minerales. El riego ocasional con "Hoagland A-Z" provee de minerales traza, combinando 1 parte de concentrado con 9 partes de agua y riegue los cactus con ello cada dos meses.
- La dopamina es precursor de la mescalina en el peyote, de manera inmediata y eficiente. Inyectar dopamina 4 semanas antes de la cosecha. Gran parte de la dopamina se transformar en mescalina. Prepare una solución saturada de dopamina base libre en una .05N solución de ácido hidroclorhídrico e inyecte de 1 a 2cc dentro de la raíz de cada planta, y la misma cantidad en la parte verde, justo arriba de la raíz. Deje a la aguja penetrar en el centro de la planta, inyecte lentamente y espere unos pocos segundos antes de sacar la aguja. Es mejor privar a la planta de agua durante 1-2 semanas después de la inyección.
- El San Pedro puede tratarse de manera similar, inyectando en la base de la planta y por cada 7,5 cm a 10 cm siguiendo una ruta en espiral a lo largo de la planta. Una serie de inyecciones pueden aplicarse a cualquier cactus cada 6-8 semanas y una última vez 4 semanas antes de la cosecha, con el fin de acumular mucha mescalina.
Kyke Sacramento